Qué significa a día de hoy elegir un “equipo dental totalmente made in Italy”.
El sector está viviendo una gran transformación. Cada vez más se habla de la gestión empresarial de la consulta dental y de la innovación tecnológica continua. ¿Qué sintonía tenéis con esta tendencia?
Me alegro de poder comenzar la entrevista con esta pregunta. Mire, para estimar el coste real de un bien duradero se calculan todos los elementos de gasto correspondientes al ciclo de vida del producto. Este criterio se aplica también al equipo dental, a la hora de su valoración no se considera solo el precio de adquisición, sino también los costes de gestión y de mantenimiento. La fiabilidad y la baja incidencia de intervenciones de asistencia necesarias de los equipos dentales VITALI reducen significativamente el coste total de propiedad, elevando la rentabilidad de la consulta odontológica. En lo referente a la innovación, en el 2014 hemos renovado por completo la gama. Para nosotros la innovación incluye varias direcciones: ergonomía, estética, versatilidad, confort y obviamente tecnología. Nuestro V8 TOUCH está en la línea de los productos más evolucionados del mercado.
¿Se puede decir que los equipos dentales VITALI se posicionan a través de su alta calidad?
Diría de modo más preciso que nuestro posicionamiento se logra gracias a la fiabilidad. Nuestros productos están al alcance de todos los que atribuyen un valor concreto a la calidad a lo largo del tiempo. Están diseñados y fabricados para quien es capaz de ver que adquirir un equipo dental bien hecho es lo más conveniente a largo plazo. Incluso económicamente. La demanda de low-cost conlleva una consecuencia inevitable: sacrificar una parte de la calidad y del servicio para poder ofrecer un precio más bajo. De manera alternativa a esta tendencia, nosotros mantenemos desde siempre la filosofía del “precio justo” lo que se confirma a través de la racionalización de los nuevos modelos. De este modo, la adopción de múltiples soluciones transversales dentro de la gama ha permitido la optimización de los costes de producción y, por consiguiente, del precio de venta.
¿Y qué significa realizar hoy un producto fiable?
La fiabilidad no es un principio abstracto, sino un objetivo compuesto de elementos tangibles y de procesos empresariales rigurosos. Para la empresa VITALI el objetivo de la fiabilidad se traduce en materiales de calidad (aluminio, acero inoxidable, bronce), componentes exclusivamente italianos y europeos, estándares de fabricación de absoluta precisión y procedimientos certificados, partiendo de controles rigurosos de los materiales y de los proveedores, pasando por la producción en la empresa y hasta pruebas de funcionamiento finales a las que se somete a los equipos dentales acabados.
¿La tecnología italiana es, por lo tanto, un factor distintivo?
Sí, por supuesto. Y por fin el mercado comienza a reconocerlo. VITALI lleva a cabo su entera producción en Italia, en el área de Bolonia, una región de muy alta especialización en el ámbito de los equipos médicos. Esto ofrece la opción de poder contar con una “cultura” del producto que añade unas cualidades técnicas para obtener excelencia en el desarrollo del producto, una enorme profesionalidad y un compromiso por parte de los recursos humanos que tienen un gran conocimiento del cuidado artesanal.
¿Se puede afirmar por lo tanto que sois una empresa que presta atención al detalle como en un taller?
Exactamente. La empresa VITALItiene unpunto fuerte que reside en la posibilidad de personalizar la configuración del equipo dental, en función de las exigencias de la consulta odontológica. Y esto, bien mirado, es exactamente lo que ocurre en un taller. Otro punto fuerte es la tradición: la empresa existe desde hace más de 60 años.
60 años no son pocos. ¿Qué peso tiene hoy la tradición?
Para mí la tradición significa, antes que nada, sacar adelante la empresa fundada por mi padre. En realidad el tema de la tradición se está volviendo muy actual, solo hay que pensar en cuanto se habla de “story telling”. Cuando una empresa es capaz de imaginar el futuro, manteniendo la coherencia con sus principios y, por lo tanto, con sus raíces, esa empresa tiene un gran patrimonio. Nosotros somos pequeños, pero tenemos a la espalda más de 60 años de creatividad italiana, de intuición técnica y de valores humanos. Una tradición que yo hoy estoy sacando adelante en las nuevas instalaciones, construidas a partir de criterios que respetan el medio ambiente y que pueden garantizar a la perfección un ciclo productivo completo y eficiente, desde la investigación al diseño y desde la producción hasta la inspección. En fin, este es el peso de la tradición VITALI. Sobre todo cuando voy al extranjero me doy cuenta, cada vez más, de que los clientes aprecian en gran medida el valor histórico de la empresa, ya que representa una garantía de competencia, de seriedad y, una vez más, de fiabilidad. A todos se nos da bien hablar de calidad. Pero después se es consciente de que hay equipos dentales y equipos dentales. Los nuestros son los que duran y nunca defraudan.
¡Entran ganas de ver estás instalaciones VITALI!
De hecho recibimos a menudo a clientes, tanto italianos como extranjeros. Quien visita las instalaciones se queda siempre muy satisfecho, también porque al estar situada en Emilia-Romagna, que es una de las regiones más acogedoras de Italia, intentamos hacer que todos los visitantes se sientan cómodos, les aconsejamos sobre cómo conciliar el interés profesional con las opciones turísticas del territorio. En un radio de pocas decenas de kilómetros hay atracciones muy interesantes: desde el museo Ferrari a las vinagreras más antiguas del mundo, los sitios de interés turístico de los Apeninos y las espléndidas ciudades artísticas de la llanura padana. Milán, que está a dos horas de coche y donde en los próximos meses, después de visitar las instalaciones VITALI, se puede visitar además la EXPO 2015.